Por Marcela Espinosa

El viernes 4 de diciembre a las 21 horas el cantante Carlos Olguín, se presenta en forma virtual por Inti Wayra Televisión. El público podrá acceder en forma gratuita a través de la página www.intiwayra.com.ar
Olguín propone un show íntimo en vivo, recorriendo su rico repertorio indoamericano, dónde no faltarán las zambas románticas como, por ejemplo, Cenizas de Jorge Milicota.
En diálogo con El Chasqui Cultural nos cuenta los detalles del show, sus expectativas y sus proyectos más cercanos.
¿Es tu primer streaming el show del próximo viernes?
-No, durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio hice algunos streaming desde casa, a través de las plataformas Zoom y Facebook, algunos más participativos donde no era yo solo, sino más comunitarios. Participé, contando y cantando, que es mi estilo, varios temas, en la Fiesta Nacional de la Flor de Escobar que fue virtual. Experiencias muy interesantes que me fueron poniendo en contacto con esta virtualidad.
¿En qué consiste este nuevo show?
-La búsqueda fue hacia las 4 regiones del país, siempre fui un cantor federal, por haber nacido en Buenos Aires he podido abordar los repertorios de todas las provincias prácticamente, amo todos los ritmos y todas las canciones tienen su encanto. Este show va a ser una nuestra de esto, donde va a haber ritmos bien diferentes entre sí y está basado en los temas de mis discos “A viva voz” de 2015 y “Ofrendas” editado en 2019, pero también habrá mucho material inédito.
¿Por qué lo definís como un show íntimo?
-A mí me gusta hacerle una introducción a cada tema, necesito contarle al público un poco la historia, contar esos detalles que son necesarios para que el tema sea apreciado en su totalidad. Por ejemplo, un tema patagónico de mi autoría “Luna mapuche” menciona algunos términos en la lengua mapudungun, me gusta explicar su significado para que la gente pueda apreciar en plenitud el sentido de la canción, eso de pararse, abrir la boca y cantar, no. Pienso que los temas necesitan un marco, sobre todo los folklóricos que son tan ricos en cuánto a su hechura, su composición. El streaming me permite esto, me interesa crear un ambiente agradable donde podamos conectarnos con la emoción.
¿Habrá interacción con el público?
-Depende de la conectividad del momento, pero la idea es que sí, inclusive esperamos público de distintas provincias e internacional por ejemplo de Colombia, México y EEUU, con el que me voy a reencontrar, ya nos han prometido su visita, así que va a estar bueno.
En una actualidad muy festivalera donde se hace acento en los grandes shows que coquetean con el pop tu propuesta es una apuesta fuerte
-Yo quiero volver a que el valor esté en el contenido de las canciones y que sean presentadas con calidad, pero con calidad interpretativa, que realmente pueda emocionarte a través de una canción. Entiendo que en un festival ir a crear algo intimista es como que tenés varios factores en contra, pero el streaming me permite exactamente lo contrario, poder llegar al corazón a través de la interpretación de un tema, transmitir el mensaje de una letra.
¿Tu trabajo siempre fue en esa línea?
-Esto que se va a ver el viernes, no es el resultado de una propuesta nueva mía, sino que es el rescoldo de toda mi vida artística, de la bandera que siempre levanté. Afortunadamente yo me he podido desarrollar en otros ámbitos un poco menos comerciales y pude estar en lugares hermosos como, por ejemplo, compartir América en cueros con Gustavo Cerati, Pedro Aznar, Jairo, Lito Nebbia, Suna Rocha, fui el último solista de Leda Valladares. Tuve la oportunidad de estar en la inauguración de la Biblioteca Nacional, en los homenajes a Leda siempre me llaman, me moví en otro circuito y me siento muy contento de encontrar todavía ambientes así.
¿Qué respuesta encontrás en el público, especialmente en los más jóvenes?
-Mis raíces tienen que ver con la caja, la vidala y la baguala, nada más antiguo y ancestral que eso, sin embargo, si vos vas a ver los talleres de Miriam García, los encuentros de las copleras en las plazas, la cantidad de juventud que sigue ese canto es enorme, los seminarios son un éxito. Mi repertorio está muy teñido de lo andino, lo indigenista, el contacto que tuvieron los pueblos originarios con la naturaleza los convierte en los primeros ecologistas, entonces todo da como una gran vuelta y ahora que nos encontramos en una crisis ecológica y climática, la gente vuelve a las fuentes porque de ahí venimos, y los jóvenes dicen: “¡Pará!, me parece que es más cercano a la verdad natural lo que me plantea un indio que lo que me plantea un profesor universitario” y empiezan a valorar esa cultura que antes veían lejana, me encanta encontrarme con esas mentes abiertas.
¿Crees que lo que se vivió en los últimos meses con la crisis sanitaria va a generar un cambio en la sociedad en ese sentido?
-Esto fue un reencuentro con la naturaleza, con la Pachamama, los animales recuperaron territorio. Hubo cambios y no sé si la gente solo va a buscar joda cuando esto termine, no sé si no va a querer saborear algunas cosas más relacionadas con la humanidad, con lo profundo, con el sentido de la vida y los valores, más que con la cáscara.
¿Tenés proyectos para volver a los escenarios con público pronto?
-Sí, de hecho, ya me han ofrecido el escenario de la Fundación Mercedes Sosa, porque tiene un gran patio al aire libre, con lo cual estamos esperando dos permisos más para cumplir con los protocolos y vamos a volver con shows en vivo con todos los músicos, los bailarines y ahí nos vamos a desquitar de todo esto que hemos pasado.