Un trovador que deja un legado fundamental para la cultura folclórica argentina.
El destacado músico salteño Daniel Toro falleció ayer, a los 82 años, a consecuencia de un cuadro de neumonía por el que se encontraba internado desde el 28 de abril. Así lo confirmó su familia a través de las redes sociales “gracias a todos los que estuvieron durante todo este tiempo a su lado y acompañando con palabras de aliento y sus rezos”, expresa el comunicado “se fue físicamente, pero su historia, su voz y su música quedarán para la eternidad. Hoy más que nunca viva Daniel Toro”, finaliza la emotiva misiva.
Daniel Toro fue uno de los más prolíficos compositores del folclore argentino, autor de clásicos que interpretaron consagradas figuras del género como así también las nuevas generaciones de cantantes, lo que pone de relieve la calidad y vigencia de su obra que aborda tanto temas románticos como sociales. Entre sus composiciones destacan “Cuando tenga la tierra”, “El antigal”, “Escríbeme una carta”, “Esta noche canta Salta”, “Mi mariposa triste”, “Ay muchacha flor temprana”, “Del árbol dolorido”, “Este Cristo americano”, “Mi principito” y “Zamba para olvidarte”, entre muchas más.
En su juventud integró varios grupos folclóricos como “Los Tabacaleros”, “Los Forasteros”, “Los Viñateros” y “Los Nombradores” hasta que en el año 1967 brilló en el festival de Cosquín, cuando recibió el premio Consagración como solista.
Fue censurado por la dictadura militar de la década del 70, pero no se exilió y apeló el seudónimo de Casimiro Cobos para poder seguir cantando. Dueño de una voz única y exquisita, que perdió y nunca más pudo recuperar a causa de un cáncer de garganta, una jugada infame del destino para un hombre que tenía tanto para decir siempre comprometido con sus raíces, su cultura y las desventuras sociales. Pese a eso nunca dejó de componer.
Sin dudas Daniel Toro permanecerá vivo en cada guitarreada, en cada peña, en cada voz joven que lo interprete y especialmente en el corazón de su pueblo que siempre lo amó, lo respetó y a partir de hoy lo convertirá en leyenda.
Redacción de El Chasqui Cultural