La cantata “Diario del regreso” es una obra integral que narra el viaje de los restos del Che Guevara desde su descubrimiento en Vallegrande, Bolivia, hasta su destino final en Santa Clara, Cuba.
Con motivo de cumplirse los 100 años del nacimiento de Hamlet Lima Quintana, el próximo viernes 15 de septiembre a las 20hs, en el Auditorio Nacional del Centro Cultural Kirchner, se estrenará en Argentina la cantata “Diario del regreso”, de Hamlet Lima Quintana y Oscar Cardozo Ocampo, a cargo de la Orquesta Nacional de Música Argentina “Juan de Dios Filiberto” y el Coro Nacional de Música Argentina, con la dirección del maestro Mariano Chiacchiarini y la voz de Juan Iñaki. La orquestación estará a cargo del propio hijo del compositor: Guillermo Cardozo Ocampo. Entrada gratuita.
Dijo Hamlet: “Alguien ha dicho que el poeta puede estar toda la vida escribiendo para al final hacer una sola obra, que ese es el destino del poeta. Y yo creo que el destino mío era escribir el Diario del regreso”.
Oscar Cardozo Ocampo, por su parte, abordó con profunda emoción la partitura, con ritmos sudamericanos como el huayno, el loncomeo, la baguala, el tango, el candombe; que viajan junto al Che hasta llegar a Cuba y estallar en la guajira, la rumba, el son cubano.
La obra tuvo su estreno el 14 de junio del año 2000, al cumplirse el 72º aniversario del natalicio del Che, en Santa Clara, Cuba. Cantada por Jairo, bajo la dirección del propio Oscar Cardozo Ocampo y con la presencia de Hamlet. Días más tarde se repitió en la Habana. Nunca más se volvió a interpretar.
Hamlet Lima Quintana fue uno de los poetas fundamentales de la Argentina, autor de más de 30 libros de poesía, cuentos y narrativa.
Nació en Morón en 1923 y criado en Saladillo, el 15 de septiembre de este año se cumplirán 100 años de su nacimiento.
Descendiente por vía materna de la tribu de Coliqueo, Lima Quintana fue un poeta de la llanura, cuya obra profundizó en el hombre como centro de la problemática social, en los pueblos originarios como parte de su sangre y en los temas que curten la piel del hombre común: el trabajo, el amor y la muerte.
No consideraba la poesía cantada como un arte menor, sino sólo una forma diferente de un mismo mensaje. Escribió alrededor de 400 canciones, entre ellas, la popular Zamba para no morir. Formó parte del boom del folclore de los años ’60 y el Nuevo Cancionero, aunque su zamba La amanecida, escrita 10 años antes de aquel manifiesto, ya anticipaba el carácter de esa nueva poesía en la música argentina.
Reconocido militante comunista e incansable luchador por los derechos humanos, su obra, su palabra y su actividad fueron coherentes y consecuentes con su pensamiento hasta su último día.
Sufrió la censura, la persecución, el exilio y su nombre integró las listas negras.